El 25 de marzo de 1985, el entonces alcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván, inauguró el monumento a Julián Besteiro, presidente de las Cortes durante la II República y concejal socialista del Ayuntamiento de Madrid en 1913, profesor, político, procedente de la Institución Libre de Enseñanza, se destaco siempre por su espíritu conciliador. Durante la Guerra Civil, permaneció en Madrid hasta el final. Condenado a treinta años de cárcel, murió en la prisión de Carmona en 1940.
El monumento fue realizado por el escultor José Noja, Pepe Noja, artista muy activo y que ha promovido diversos museos de escultura al aire libre.
La obra se instaló en los jardines que llevan el nombre de Besteiro en la plaza de Santa Gema, muy cerca de la calle Vitruvio donde vivió el homenajeado. Una estatua no exenta de polémica en el momento de su instalación que fue criticada por situarse frente al santuario de Santa Gema.
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