La escapada perfecta.

   A primeros de mes hemos pasado unos días de descanso por tierras sorianas. A pesar de las predicciones meteorológicas, de las nevadas de días previos y de toda suerte de malos augurios, hemos disfrutado de un tiempo excelente para llevar a cabo nuestros planes.

    Hemos visitado pueblos medievales y aldeas recónditas, transportándonos mentalmente a otros tiempos y a otras formas de vida muy distintas a las actuales. 

   Las huellas de los dinosaurios, los fósiles de helechos y de palmeras nos han dado algún que otro escalofrío. Sobrecoge pensar qué sería de nosotros si nos encontráramos un animalito de esos. Pero contemplar las huellas del pasado también nos ha enseñado lo efímero de nuestro paso por la vida. 

   Los paseos por sendas solitarias acompañados por el rumor de los riachuelos y  con la sierra Cebollera al fondo han sido maravillosos. Nos hemos extasiado con las aguas cristalinas del rió Abión que nos ha ofrecido graciosamente el  mundo multicolor que alberga en su fondo. Nos ha deleitado el valle del rió Razón, con pinares inmensos tapizados por praderas verdes que invitaban a sentarse y  a disfrutar de la caricia del sol. Entre la espesura hemos divisado corzos y ciervos en su quehacer diario, ajenos a nosotros, intrusos de ciudad.

     Nos acercamos a Molinos de Razón a visitar a Marta Arribas y Manolo Ruiz, nuestros maestros  -en cerámica, ella y en bastones, él. Nuestros amigos han tenido la generosidad de permitirnos curiosear en los entresijos de su taller y comprobar cómo su obra va evolucionando y creciendo. Por su trabajo constante y su maestría, cada día tocan con la punta de los dedos a Dios.
    Me transmiten un saludo para los seguidores de este cuaderno de bitácora (blog) que se han puesto en contacto con ellos con intención de conocer su obra y encargarles  piezas.  Me dicen que, en breve, mandarán los pedidos pendientes.
     Han obsequiado al blog con el bastón de mando que aparece en  la fotografía que ilustra este post.   Yo,muy honrado con tal distinción,  lo he aceptado en nombre de los muchos seguidores que visitaron  los post  titulados: "Alfareros. Aprendices de Dios" y "El bastón, una prolongación del brazo". También es  vuestro,  amigos.     

    En resumen, que la escapada ha sigo magnífica, no solo por las excursiones sino también por la compañía  Nos hemos reído mucho, hemos comido bien y nos hemos encontrado muy a gusto con los integrantes del grupo. Se puede afirmar  que ha sido la escapada perfecta.