domingo, 14 de julio de 2013

A Nora, a Aitana.

Firma invitada: Ana Moreno.

         Cuando en la antigüedad nacía un niño, los arúspices consultaban el vuelo de las aves para conocer el futuro de los recién nacidos. Yo no soy arúspice, soy solo vuestra tía, pero, emulando a  los antiguos romanos, esta mañana al conocer la noticia de vuestro nacimiento, me he asomado a la terraza y he visto dos hermosísimas  gaviotas pespunteando el cielo azul de julio.  ¡Buen augurio!  Dos gaviotas volando libres, con decisión y seguridad son una buena metáfora de lo que creo que vais a ser vosotras, mis queridas Nora y Aitana.
Hoy es 10 de julio, seguro que tal día como hoy sucedieron muchos acontecimientos históricos que, en estos momentos, os importan bien poco. Bastante tenéis con aclimataros a este mundo nuevo, con aprender a respirar y a comer; con reconocer a vuestros papis y con aguantar los ecos de las voces de los que han ido a conoceros. No hay que preocuparse, es una tarea sencilla que, poco a poco, iréis realizando sin dificultades. Además estoy convencida de que sois unas chicas muy espabiladas que vais a superar con notas altas estos primeros días de novedades. Vuestros padres son los que se llevarán la peor parte en estos días iniciales. Tened en cuenta que ellos tampoco saben nada de cómo ser padres, de cómo bañaros o arroparos, de cómo atenderos y cuidaros. Pero como también son chicos listos superarán brillantemente los primeros apurillos. 
Habéis nacido en verano, eso me gusta. El verano es una estación del año optimista y suave, relajada y vital. Nacer en verano imprime a las personas un carácter positivo, como el día de hoy que ha amanecido espléndido y luminoso, de un azul intenso y limpio, con el sol naranja colándose por entre las agujas de los pinos, con una brisa tenue inflando las cortinas de los balcones. A mí me hubiera gustado que alguien hubiera recogido algún testimonio del día en el que nací, pero no tuve esa suerte. Por esta razón, y esperando que a vosotras os guste saber qué ocurría el día preciso en el que aparecisteis por este mundo enloquecido, me he lanzado a dejar constancia de estas sensaciones y curiosidades que quizá os gustará conocer cuando seáis un poco más mayorcitas y voléis libres como las gaviotas que, esta misma mañana, han acompañado con sus amplios vuelos la feliz hora de vuestro nacimiento.

1 comentario:

  1. Atn Javier que Anita viene pisando fuerte, vaya pedazo de epistola, con sentimiento, intención y originalidad.
    Me encanta lo de saber que pasaba el día que nacisteis y el pespunteado de las gaviotas en el azul del cielo.
    E Nora buena y Aitana tambien.
    Quería decir enhorabuena tías Ana.

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