El Partido Popular considera que abrir los comedores escolares en verano genera "excesiva visibilidad" de la pobreza infantil.
El problema que tenemos en España es la hipocresía social: el quid de la cuestión es que en esta sociedad hay ciudadanos que pasan hambre; lo triste es que hay pobreza infantil; lo vergonzoso es que hay niños que no hacen una comida en condiciones fuera del comedor escolar; lo lamentable es que hay niños que van al colegio sin desayunar.
Esta sociedad dispone de representantes, elegidos por los ciudadanos, para solucionar sus problemas, pagados con los dineros de todos. Resulta intolerable que nuestros representantes ofrezcan, por toda solución, tapar los problemas y esconderlos debajo de las alfombras.
Quienes tienen excesiva visibilidad son los políticos teatreros, que piensan que el país es un decorado y que, mientras tenga buena cara, todo va bien. Aunque por detrás del escenario esté todo sucio, corrupto y podrido.
¿Qué importa que se vea que hay hambre? Lo fundamental es solucionar el hambre, dar de comer a esos niños y esos padres y, paralelamente adoptar las medidas necesarias para que las familias puedan sostenerse, valerse por sí mismas.
Mientras las cosas sigan así, poco importan las abdicaciones, las coronaciones, las tomas de posesión, las monarquías, las repúblicas, los políticos, las dependencias, las independencias y los hechos banales que provocan gastos del dinero público.
Políticos excesivamente vistos, marchaos de una vez a la mierda, que es donde mejor os desenvolvéis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario