Que mejor que pasar el tiempo en familia consumiendo cultura. ¿No os parece?
Embajadores, 9 MADRID
Del 18 de septiembre al 9 de Diciembre
Introducción
Escrita entre 1619 y 1620, y representada por primera vez en Palacio el primero de octubre de 1623 por la Compañía de Fernán Sánchez de Vargas, es la gran creación dramática del autor y una de las obras maestras de nuestro teatro. Se publica en 1630 atribuida a Lope de Vega, pero años más tarde aparece ya incluida en la segunda parte de comedias de Ruiz de Alarcón.
Enredo amoroso y didactismo son dos ingredientes fundamentales de esta comedia seria articulada en torno a la figura de su protagonista, el mentiroso D. García. Su desbordante imaginación, que le lleva a creerse las fábulas que él mismo construye, y la no menos falsa, aunque no tan llamativa, actitud de los que le rodean, dotan a la obra de una atmósfera imprevisible que se mueve en un presente continuo, en el que se hace difícil distinguir la verdad.
El autor pretendía contribuir con esta comedia moralizante a reformar las costumbres de una sociedad habituada al lujo de la Corte y a la frivolidad, empeño en el que se hallaba la dinastía austriaca del primer tercio del XVII Una sociedad en la que el honor heredado se contraponía al honor nacido del propio valor personal.
La mentira siempre tiene sus razones y, más allá de lo que llamamos mentiras piadosas, su objetivo es siempre sacar ventaja.
Nos divierte y hasta nos enternece este trapacero, nos hacen reír o sonreír los sucesivos errores de interpretación y equivocaciones, nos hace reflexionar sobre el mundo ilusorio en el que viven los personajes de esta comedia irónica llena de hondura, tan alejado de la verdad y, por tanto, de la libertad.
Helena Pimenta | Directora del montaje.
Teatro María Guerrero
Tamayo y Baus,4 Madrid
REPARTO: (por orden alfabético)
José Luis Alcobendas, Diana Bernedo, Lola Casamayor, Roberto Enríquez, Karina Garantivá,Alberto Jiménez, Jorge Machín, Toni Márquez, Julia Moyano, Paco Ochoa, Belén Ponce de León,Vanessa Vega
3 de octubre a 17 de noviembre de 2013
En el Departamento de Obras de consulta de un gran grupo editorial, cuatro mujeres trabajan en la confección de un atlas de geografía en fascículos. Reunidas por azar en ese proyecto, y muy distintas entre sí, todas comparten, sin embargo, una edad decisiva, en la que el peso de la memoria matiza ya la conciencia del tiempo y de la Historia. Mientras investigan, buscan materiales y fijan datos, Ana, Rosa, Marisa y Fran se encuentran en ese punto de inflexión de la vida en que no pueden aplazar más la necesidad de encararse de una vez consigo mismas, despejar dudas, deseos y contradicciones ya insostenibles para situarse ellas mismas en su propia geografía, en su propio atlas. Así, iremos descubriéndolo todo sobre cada una de ellas y sobre el mundo que las rodea, que no es otro que el de toda una generación: su soledad, sus inhibiciones, sus sueños truncados, sus decepciones, pero también sus pasiones y sus amores inconfesados, su dureza y su ternura, sus derrotas y sus grandes conquistas.
Enredo amoroso y didactismo son dos ingredientes fundamentales de esta comedia seria articulada en torno a la figura de su protagonista, el mentiroso D. García. Su desbordante imaginación, que le lleva a creerse las fábulas que él mismo construye, y la no menos falsa, aunque no tan llamativa, actitud de los que le rodean, dotan a la obra de una atmósfera imprevisible que se mueve en un presente continuo, en el que se hace difícil distinguir la verdad.
El autor pretendía contribuir con esta comedia moralizante a reformar las costumbres de una sociedad habituada al lujo de la Corte y a la frivolidad, empeño en el que se hallaba la dinastía austriaca del primer tercio del XVII Una sociedad en la que el honor heredado se contraponía al honor nacido del propio valor personal.
La mentira siempre tiene sus razones y, más allá de lo que llamamos mentiras piadosas, su objetivo es siempre sacar ventaja.
Nos divierte y hasta nos enternece este trapacero, nos hacen reír o sonreír los sucesivos errores de interpretación y equivocaciones, nos hace reflexionar sobre el mundo ilusorio en el que viven los personajes de esta comedia irónica llena de hondura, tan alejado de la verdad y, por tanto, de la libertad.
Helena Pimenta | Directora del montaje.
Teatro María Guerrero
Tamayo y Baus,4 Madrid
DOÑA PERFECTA
Galdós quiso hacer una metáfora de la España de su tiempo: la imaginaria ciudad de Orbajosa era toda una nación menguada, arcaica, ensimismada, y la dolencia que aquejaba a los personajes del relato la propia de un país enfermo de atraso y superstición. Este planteamiento simbolista lo desarrolló, no obstante, con un inequívoco empeño realista que se exacerba, como en Cervantes o en La Celestina, hasta lo tragicómico. Escrita por un joven novelista exasperado ante el fracaso del proyecto liberal que pretendía modernizar la España de su época, Doña Perfecta anticipa el anhelo de regeneración de nuestra vida política y social característico de toda la literatura noventayochista. El autor, en principio, toma partido a favor de Pepe Rey, un joven ingeniero portador de valores ilustrados contrapuestos al dogma y al cerrilismo localista de los orbajosenses; sin embargo, a medida que progresa la acción de la trama y aumenta la desavenencia entre éste y doña Perfecta, la obra adquiere tintes trágicos y tanto sus protagonistas como sus antagonistas terminan siendo víctimas y culpables a un mismo tiempo de un fatum que acaso no sea otro que el de nuestra convulsa y atribulada Historia |
REPARTO: (por orden alfabético)
En el Departamento de Obras de consulta de un gran grupo editorial, cuatro mujeres trabajan en la confección de un atlas de geografía en fascículos. Reunidas por azar en ese proyecto, y muy distintas entre sí, todas comparten, sin embargo, una edad decisiva, en la que el peso de la memoria matiza ya la conciencia del tiempo y de la Historia. Mientras investigan, buscan materiales y fijan datos, Ana, Rosa, Marisa y Fran se encuentran en ese punto de inflexión de la vida en que no pueden aplazar más la necesidad de encararse de una vez consigo mismas, despejar dudas, deseos y contradicciones ya insostenibles para situarse ellas mismas en su propia geografía, en su propio atlas. Así, iremos descubriéndolo todo sobre cada una de ellas y sobre el mundo que las rodea, que no es otro que el de toda una generación: su soledad, sus inhibiciones, sus sueños truncados, sus decepciones, pero también sus pasiones y sus amores inconfesados, su dureza y su ternura, sus derrotas y sus grandes conquistas.
Exposiciones
Entre el tardomodernismo y la globalización: prácticas artísticas durante las décadas de los 80 y 90
19 junio – 28 octubre, 2013
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