jueves, 26 de noviembre de 2015

Desfiladero de las Xanas

   El desfiladero es considerado como el hermano menor de la ruta del Cares. En efecto, tiene cierto parecido. Bien es cierto, que en lo único que es menor el de las Xanas con respecto al Cares es en su longitud, ya que en belleza y espectacularidad están a la par, por no decir que es superior el de las Xanas, en cuanto a magia, misterio y leyendas son incomparables.
 En las Xanas nos olvidamos de la masificación del Cares, disfrutamos de una mayor variedad de ecosistemas y también es más apto para todas las edades; sin importar demasiado la condición física del excursionista
  Para hacer la ruta de las Xanas hemos de emplear de dos a tres horas entre la ida y la vuelta, aunque al final os propondré otra forma de terminar esta maravillosa ruta, que a lo mejor os interesa.
  Cruzamos el desfiladero, atravesando zonas abruptas por un sendero que llega pasar a más de 80 metros sobre el río de las Xanas. En el trayecto, nos encontraremos túneles, puentes y manantiales naturales y el último tramo lo haremos a través de un bosque de gran frondosidad.
   La senda tallada en la roca fue construida en los años cincuenta con la intención de comunicar pueblos pertenecientes a tres municipios: Santo Adriano, Quirós y Proaza; pero las obras no llegaron nunca a finalizarse.
 El desfiladero constituye una angostura de dos kilómetros de longitud, con desplomes verticales espectaculares de casi quinientos metros, que son el resultado de la paciente erosión del río Viescas en su descenso para confluir con el Trubia.
   El nombre del desfiladero es en honor a el hada por excelencia de la mitología asturiana, la Xana. 
   La Xana vive en las cuevas de los ríos y en las fuentes. Un personaje que no podía tener mejor personificación que una ruta como ésta, en la que el agua es dueña y señora de la naturaleza. De todas formas si permanecéis en silencio y agudizáis los sentidos, seguro que podréis ver alguna Xana  peinándose a la orilla del río.

















  




























Como llegar:
   Tenemos que acercarnos hasta Villanueva, capital del concejo de Santo Adriano. Podemos hacerlo por la carretera N-634 desde Oviedo, dirección Grado, o por la Autopista A-66 desde Oviedo. Tanto por la Nacional como por la Autopista llegamos a Trubia. Allí enlazamos con la AS-228 que nos lleva hasta Villanueva.
Poco antes de esta localidad, a nuestra izquierda, hay un área recreativa donde podemos dejar el coche. Aquí existe señalización clara del comienzo del sendero.


Descripción:
Sugerencia:
   Una vez llegados a la ermita de San Antonio, continuar el camino hasta el pueblecito de Pedroveya y alli podéis comer en Casa Generosa. 
      No pidáis lujos, ni exquisiteces, tan solo sentaros y degustar el menú, si podéis con todo, claro. Luego, la vuelta con calma y tranquilidad. Merece la pena.

Fotofrafia: JKRuiz y JRuiz  

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