Mariano haciendo el tancredo.

   ¡Por fin! Un ministro, aunque sea en funciones, abandona el gobierno. ¡Madre mía! Ha costado.

  Este señor Soria ha tardado casi una semana en irse de la escena política. Lo que no sabemos es si renunciará al sueldo, a la pensión y demás prebendas de los ministro cesantes. ¿Os imagináis qué va a hacer?

 Que se vaya este señor, en realidad, no tiene mucha importancia. Lo importante y trágico es que su jefe, el señor Presidente del Gobierno de España en funciones, don Mariano Rajoy no le ha echado antes. ¿Por qué? 

   A mí se me ocurren algunas hipótesis para responder a tal pregunta. Mirad, por alguna de estas tres razones o por las tres a la vez, nuestro egregio presidente ha mantenido en el equipo al titular de Industria:    
-Si Soria ha tenido participación en la trama de los papeles de Panamá, el Presidente debe invitarlo a salir de la política. 
-Si un hombre de confianza del Presidente de Gobierno miente a la ciudadanía y cambia de versión cuatro veces en tres días, el Presidente debe dimitir.
-Si un ministro de España no sabe si ha sido administrador de una empresa, si ha trabajado en otra o ha ejercido de secretario en una tercera, el Presidente debe dimitir. Queda meridanamente claras su falta de dotes de organización y su  capacidad para guiar un país por la senda del progreso.
 Una vez más, ante sucesos tan graves, el señor Presidente se ha quedado haciendo el "Tancredo". Es usted, don Mariano, el que debe dimitir. Váyase ya.