Bombardino está en la Calle Salitre, 2, casi esquina con Santa Isabel y cerca de Lavapies.
En 1912 existía en el mismo lugar una bodega llamada Casa Lara, donde se despachaban vinos a granel. En torno a 1928 realiza una reforma, cubren su fachada con unos azulejos elaborados por la Casa Carlos González y Hermano de Gran Vía, 14, autores también, de los azulejos de la Plaza de España de Sevilla, de la azulejería del Edificio ABC (junto con Daniel Zuloaga) y de Polo Norte Fábrica de Sodas en San Juan de Puerto Rico.
En 1985 el local es adquirido por Servando Pedroche que realiza una reforma interior incluyendo tres arcos de medio punto en ladrillo rústico. Entre 1987 y 2015 fue conocido como La Taberna Encantada, un café donde actuaban cantautores, poetas...
En el verano de 2016 reabre sus puertas como Bombardino, un bar de tapas fusión italiano español donde también podemos encontrar músicos y poetas. Sus dueños son Emanuele Bona y Jorge Riera.
El establecimiento es mediano, con mesas altas, medias y bajas, a gusto del consumidor. Mobiliario de distintos estilos pero coherente. Ambiente cálido.
Se puede disfrutar de un desayuno o un brunch, degustar su plato del día (como un bruschettone con speck y scamorza ahumada) o tomarte un cocktail por la noche, por ejemplo el Bombardino que da nombre al local, mientras escuchas a un guitarrista acompañado con castañuelas o a una poetísa declamar versos de Lorca.
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