El Museo de las Patatas, oficialmente llamado Bar Hermanos Guío, es un local de los de toda la vida, abrió sus puertas en 1980 y es emblemático dentro del tapeo del barrio de Delicias.
Situado en la calle Ferrocarril 21, muy cerquita del Museo del Ferrocarril de Delicias, este bar, desde siempre, como se deduce por su nombre es famoso por sus raciones de patatas, además de por su terraza cerrada.
El objetivo principal de su fundación, se cumple, homenajear a la patata, una patata especial traída desde Segovia.
Si pedimos unas cañas, vienen acompañadas de una señora ración de patatas bravas. Eso ya para empezar, por el precio de una caña podemos comer unas ricas bravas.
Pero el espectáculo de la patata no acaba aquí, en este su templo, podemos probar las patatas revolconas, alioli o las "patatas con", con chorizo, con beicon, con oreja, con albóndigas, con salchichas, con lacón, con pimientos o con cualquier cosa que se os ocurra. Todas estas raciones por unos siete u ocho euros. No está nada mal para el tamaño considerable y los dos huevos fritos que acompañan a cada plato.
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