domingo, 29 de noviembre de 2020

Camino Jubilar 2021. Etapa 10ª. Muros de Nalón - Cadavedo

 Etapa de largo recorrido que se puede dividir en dos:
   - Hasta Soto de Luiña, con desniveles frecuentes pero moderados, y con una sola aproximación a la costa en La Concha de Artedo. 
   - De Soto a Cadavedo, tanto si optamos por el Camí Real de Las Ballotas (por la costa) como por la Sierra de Las Palancas (por montaña), estamos frente a una de las etapas más bellas de todo el Camino del Norte.  Vistas sobre los acantilados, con acceso a playas, bien señalizado y con servicios. El camino por montaña, el histórico, se rehabilitó y señalizó en 2016 después de muchos años abandonado; solo es apto con buenas condiciones meteorológicas y para peregrinos en buena forma física.

  






Distancia: 

33,8 km
Duración: 
 
9 horas 
Dificultad:
4/5
Paisaje/Naturaleza: 
5/5


Recorrido:
Km. 0   Muros de Nalón
Desde la plaza de la iglesia tomamos la calle en dirección a la Oficina de Turismo

Km. 4,0 El Pito  
  
Seguimos la carretera CU-2 en dirección a Cudillero, pasando junto al Palacio de Selgas y a la iglesia de Jesús de Nazareno. A la altura de un moderno edificio dejamos la carretera y nos desviamos a mano izquierda, avanzando primero por pista de asfalto y luego por un sendero por el cual vadeamos dos arroyos.

Km. 8,6 El Rellayo  

A la salida, por pista de tierra pasamos por dos veces bajo un viaducto de la A-8, cruzamos la N-632 y descendemos (en La Magdalena, con bar-restaurante cerrado) hacia la playa de La Concha de Artedo, la cual dejamos a 400 metros a mano derecha. 

Km. 12,4 Mumayor
Cruzamos de largo la aldea de Mumayor, y al final torcemos a la derecha por una carreterita en ascenso: la seguimos 250 metros hasta tomar, por la izquierda, una bonita senda herbosa que cruza en bajada un espeso bosque.

Km. 15,3 Soto de Luiña

A la altura del hotel Valle Las Luiñas, muy cercano al albergue, tomamos un camino que pronto nos devuelve a la carretera N-632a; la seguimos unos metros hasta tomar un camino por la derecha. Pocos después cruzamos la misma carretera, junto a una rotonda.

 Bifurcación: justo pasado el hotel Cabo Vidio hay un mojón con la siguiente leyenda: "Ballota" recto, "Camino" izquierda. Nosotros, la seguida por casi todos los peregrinos, continuamos recto. 

Km. 18,9 Albuerne
Pasamos junto a una pequeña ermita y a la salida tomamos de bajada un camino para cruzar la primera de la “ballotas”; según el caudal del arroyo, deberemos hacer equilibrios sobre las piedras para cruzarlo sin mojarnos.

Km. 20,4 Novellana   
Cruzamos el pueblo por la carretera y salimos por la derecha para afrontar la segunda de la “ballotas”, descendiendo por una bonita senda entre la espesa vegetación, cruzamos otro arroyo y volvemos a alcanzar, en subida, la misma carretera N-632a.

 Castañeras, pueblo sin servicios; a unos 700 metros fuera del camino, podemos acercarnos a la bonita playa del Silencio.

Km. 22,1 Castañeras
En Castañeras tomamos una calle por la derecha y, a 250 metros, torcemos a mano izquierda por una pequeña senda: por ella superamos la “ballota” número tres.

Km. 24,3 Santa Marina  
Tomando una calle por la derecha la nacional, que se prolonga en una pista asfalta y más adelante de tierra, superamos otro minivalle, este de menor desnivel y sin aproximación a la costa.
 
Km. 26,8 Ballota   
Salimos de Ballota por la nacional. A 800 metros torcemos a la derecha por una pista de tierra en bajada, afrontando con decisión la quinta “ballota”.
El camino gira a la izquierda para cruzar el río Cabo; en este punto, delante, a 120 metros, vemos la playa de Ballota (o del Río Cabo), a la que recomendamos una visita. Una vez de regreso cruzamos el río Cabo por un puente de piedra; antes aquí se encontraba el frágil Le pont qui tremble (El puente que tiembla), temido por los peregrinos del medievo por motivo obvio. Ascendemos luego por la vertiente opuesta, siguiendo un sendero que se abre paso entre la densa vegetación.

Km. 8,8 Tablizo
Sin tomar contacto con la nacional, y cerca de los acantilados, continuamos por una pista forestal, entre bosques y pastos, cruzando un minivalle con preciosas vistas sobre el océano.
 
 Abandonamos la nacional por un senda herbosa a mano derecha, en fuerte baja. Séptima y última “ballota”. En el fondo del valle hay una pista asfaltada transversal: el camino sigue de frente en subida, pero a tan solo 500 metros a la derecha podemos visitar la bonita playa de Cadavedo. Al final de la subida ya alcanzamos la primeras casas de Cadavedo.

Km. 33,8 Cadavedo




Al Loro
Atención:




Etapa básicamente rural, con desniveles frecuentes pero moderados.

Cudillero
El camino no pasa por la pintoresca, marinera y turística localidad de Cudillero; cae a 1,8 km de El Pito. Sin embargo, la mayor parte de la etapa de hoy y de mañana transcurre por su concejo (municipio).

Soto de Luiña
Localidad agradable, con todos los servicios; quien en verano desee darse un baño puede bajar por la carretera local a la bonita playa de San Pedro (hay un camping y servicios), a 2,2 km del pueblo.

En El Pito hay un bar a pie de camino (no cuenta con servicios de lunes a miércoles en temporada baja), y en El Rellayo hay bar-restaurantes en temporada alta.

Soto de Luiña
Cuenta con un gran albergue de peregrinos en las Antiguas Escuelas, de equipamiento básico, reformado en 2016 y con 60 plazas.


El Pito
El deslumbrante Palacio de Selgas, rodeado de tres bellos jardines (Francés, Italiano e Inglés), cuenta con una extraordinaria y valiosa pinacoteca. Su visita es complicada, pues solo abren ciertos años, para más info: Fundación Selgas-Fagalde

El Pito
En la iglesia de Jesús de Nazareno, neorrománica, junto a la cual pasamos, se resguarda el altar más antiguo de España (siglo VIII): como dato curioso reseñar que el altar fue usado, hasta 1905, como mesa en una taberna…

Soto de Luiña
Cabe destacar la iglesia de Santa María (siglo XVIII) y, junto a ella, la Casa Rectoral, noble edificio que antiguamente fue un hospital de peregrinos.


El camino por la Sierra de Las Palancas, montañoso y con paisajes fabulosos, es de longitud similar a su alternativa costera, no cuenta con servicios intermedios y tiene un desnivel en subida acumulado de 735 metros, alcanzando una altitud máxima de 633 metros. A fecha de febrero de 2020, nos dicen: "es perfectamente realizable por cualquier peregrino con una cierta preparación física, solo hay que tener cuidado con el tiempo y evitarlo en caso de niebla. Está bien señalizado en su totalidad, con mojones con la típica concha de vieira (aunque con las flechas amarillas estaría mejor). Casi todo el trayecto discurre por pistas de tierra, bastante limpio y abierto. En algunos tramos, el suelo es de tierra con piedras y matojos, algo irregular.". Ojo, como vemos en el mapa no termina en Cadavedo, sino en Villademoros, 1,4 km más allá.

El Camí Real de las Ballotas, cercano a la costa, cruza siete minivalles ("ballotas"). El cuento, como diría Mario Benedetti, es muy sencillo: salimos de un pueblo, bajamos hacia la costa por la ladera este (por senda o camino de tierra), cruzamos un arroyo (ojo en épocas de lluvia), subimos por la ladera oeste, y arriba llegamos a otro pueblo… y vuelta a empezar. 

En pleno invierno, o en época de mucha lluvia, el barro o mal estado de los caminos, o los arroyos crecidos, nos podría obligar a caminar algunos tramos o toda la etapa por la nacional N-632: como siempre, precaución.

Castañeras
Merece la pena acercarnos a la playa del Silencio (700 m fuera del camino, bien señalizado desde el pueblo), aún sin necesidad de bajar hasta la arena, pues disfrutaremos de unas espectaculares panorámicas.

Entre Ballota y Tablizo bajamos hasta el río Cabo, donde antes de cruzarlo vemos la playa de Ballota (o Río Cabo) a 120 metros, un lugar bellísimo; aunque algo incómoda para el baño, sería imperdonable no acercarnos a ella a descansar sobre alguna de sus piedras contemplando el mar, y para, quién así lo desee, meditar y/o divagar sobre el sentido de la existencia…


Cadavedo

Entre Ballota y Tablizo cruzamos el río Cabo por un puente de piedra; antiguamente, en el medievo, había que cruzarlo por un frágil puente construido de troncos y cuerdas, temido por los peregrinos, conocido como Le pont qui tremble (El puente que tiembla).

Cadavedo
Si aún nos quedan ánimos para caminar un poco más, podemos visitar la ermita de La Regalina, a 1,5 km del pueblo, emplazada sobre los acantilados y con buenas vistas.

Como platos destacados de la jornada sobresalen las calderetas de pescado, o la sopa de pixín.

A pocas jornadas de entrar a Galicia, aparece alguna elaboración compartida con su gastronomía: la empanada, en este caso de angulas.


Imagenes:

de Muros de Nalón



por Soto de Luiña




a Cadavedo



No hay comentarios:

Publicar un comentario