Etapa corta y sin ninguna dificultad orográfica. En general avanzaremos por cómodas pistas, tanto de asfalto como de tierra, aunque también deberemos soportar algún tramo por el arcén de la carretera.
Hoy nuestro Camino del Norte confluye con el Camino Francés en la localidad de Arzúa. Se echa en falta un mojón o una mínima placa que deje constancia de los 784 kilómetros caminados desde Irún, o bien 827 kilómetros desde Bayonne.
Distancia:
22 km
Duración:
Duración:
5,5 horas
Dificultad:
2/5
2/5
Paisaje/Naturaleza:
2/5
2/5
Km. 0 Sobrado dos Monxes
Salimos de Sobrado dos Monxes siguiendo la calle principal (que corresponde a la carretera AC-934) en dirección hacia Arzúa.
8,5 As Corredoiras
9,9 Boimil
11,7 A Gándara (Boimorto)
Siempre por la calle principal, atravesamos la larguísima población de Boimorto (con más de un kilómetro entre sus extremos). A la salida, frente al centro de salud, encontramos una bifurcación, donde hay un cartel informativo: aquí deberemos escoger entre seguir hacia Arzúa o tomar la variante que lleva hacia Lavacolla (por la capilla de A Mota), ya muy cerca de Santiago.
14,8 Sendelle
22,0 Arzúa
Atención:
- Los que lleven muchas jornadas por el Camino del Norte quedarán atónitos ante la vorágine de peregrinos que encontrarán en Arzúa. Se pierde en intimidad y, a cambio, se gana en compañía.
- Quienes deseen prolongar al máximo este Camino del Norte antes de "chocar" con el Francés, tienen la posibilidad a la salida de Boimorto de tomar una variante más directa que lleva hasta Lavacolla, ya a tiro de piedra de Santiago. Es una ruta de 30,8 km (8 km menos que por Arzúa) con escasos servicios intermedios pero perfectamente señalizada, que pasa por la capela da Mota y el lugar de Orxal.
- Durante la jornada tenemos bares o tiendas en As Corredoiras y Sendelle, mientras que en Boimorto encontraremos todo tipo de servicios.
- A Gándara (Boimorto). Aquí disponemos de un albergue de la Xunta, situado 500 metros antes de la población, y un albergue privado casi al final de la misma.
- Los quesos Arzúa-Ulloa, suaves y con un punto de cremosidad, son los protagonistas gastronómicos de la etapa. Como postre con membrillo resultan una delicia.
Imagenes:
de Sobrado dos Monxes
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