Para encontrar esta piedra hay que llegar hasta la Iglesia de san Nicolás de los Servitas.
San Nicolas se encuentra muy cerca de la calle Mayor, a la altura de la Iglesia Catedral castrense, de la catedral de la Almudena y también del Palacio y el Teatro Real.
Este templo es sin lugar a duda uno de los más antiguos del Madrid actual, y el más antiguo del Madrid anterior al siglo XX. Ya aparecia mencionado en el Fuero de la ciudad de 1202 y todo apunta a que anteriormente en este mismo lugar se levantó una mezquita musulmana.
Si caminamos hasta ver su parte trasera, veremos como las piedras forman muros que replican la forma del ábside desde el exterior y es ahí donde, con un poco de agudeza visual, un sillar nos llamará la atención sobre el resto.
En la pared que se ve la cartela que indica el nombre de la ‘Travesía del Biombo’ hay a su lado una vetusta ventana con barrotes de hierro, pues en su esquina inferior derecha veréis el misterioso sillar del que os estoy hablando. Varias letras un tanto abigarradas e ilegibles.
Todo apunta a que esta piedra perteneció originalmente a una lápida sepulcral que se reutilizo en la reforma de la iglesia del Siglo XV, lo que nos da una fecha aproximada de la antigüedad de esta inscripción.
No sacaremos nada en claro seguramente, pero el paseo por estas callejas y plazas en horas tempranas es una delicia.
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