Señor Feito ¿Porqué no se calla?

"El presidente del Instituto de Estudios Económicos (IEE) y presidente de la Comisión de Economía de la CEOE, José Luis Feito, señala que la reforma de las pensiones debe ser "profunda" y considera que los trabajadores deberían jubilarse a los 70 años y cotizar hasta 40 años para poder cobrar el 100 % de la pensión."

"Feito ha abogado por recortar la prestación por desempleo inicial a cambio de alargar el periodo de cobro de la prestación a los parados de larga duración, e introducir reformas en las políticas activas de empleo para reducir en lo posible la permanencia en la situación de desempleo."

    La lectura de estas declaraciones  me revuelve las entrañas de clase y me dan ganas de mandar al señor Feito y a su repajolera prima a la mierda. Pero no,  mejor no le voy a mandar, no vaya a ser que en la mierda no lo admitan y me lo devuelvan  contra reembolso.  Mejor voy a mandar a la mierda a los grandes sindicatos de clase -esos que cobran por cada despedido de un ERE y negocian, a espaldas de sus representados, en busca de condiciones ventajosas para ellos mismos. Sí, sí, a esos.

   No les mando por lo que hacen sino, precisamente, por lo que no hacen. No se entiende bien cómo no aparecen, como si de un resorte se tratase, ante los medios de comunicación para responder a semejantes declaraciones y para dejar claras las cosas a la ciudadanía. Ya se sabe que el que calla otorga y ya está bien de otorgar, señores sindicalistas aburguesados, socialistas de derechas. Ya está bien.
    Deberíais abanderar un movimiento ciudadano para recobrar el espíritu de clase, el impulso de lucha, para recuperar lo que nos están quitando. Sin embargo permanecéis callados. ¿Qué pensarían de vosotros Marcelino Camacho, Pablo Iglesias, Nicolas Redondo y tantos otros que se dejaron la vida en la lucha obrera? 

    Hay que salir a decir al señor Feito que alargar la vida laboral hasta los 70 años es una crueldad en el fondo y una estupidez en su boca. Lo que  este caballerete defiende supone, en realidad, condenar a los trabajadores de más de 60 años a un paro prolongado. Cobrarán  un subsidio -más bajo al principio y un poco más largo en el tiempo-, por si hay algún pertinaz obrero que, a pesar de perder las prestaciones sanitarias y asistenciales, milagrosamente continúa viviendo, no se muere y llega a los 70.

    Habría que preguntar al señor Feito si los empresarios estarían dispuestos a mantener a  obreros con rigidez mental, con problemas de memoria, con falta de reflejos, con limitaciones para reciclarse profesionalmente, con problemas de artrosis, reumas, artritis, meniscos, caderas, rodillas, espalda, coágulos, aneurismas  -y demás dolencias  terminadas en -itis y -osis.  ¿A cuántos de estos mandamos a los andamios, a las fundiciones, a las cadenas de montaje, a las centrales nucleares, a la policía a los quirófanos, a conducir autobuses, metros, trenes, ambulancias, a  presidir el Instituto de Estudios Económicos (IEE) y   la Comisión de Economía de la CEOE?
   Se tiene la obligación moral de hacer ver  al señor Feito, y a tantos otros señores Feitos que pululan por este mundo, que el tiempo pasa para todos, hace mella en todos si excepción. Incluso podríamos citar como ejemplo de los estragos que causa la edad las mismísimas declaraciones  del señor Feito. Y eso que tan solo tiene 61 años. Cuando llegue a los 69, que Dios no pille confesados.
    Señor Feito quieto en el sillón. Sindicatos Comisiones y UGT.  ¡A la mierda hombre!, ¡A la mierda!.