Curioseando por Internet, hoy me he encontrado con un interesante blog (artedemadrid, escrito por Mercedes Gómez) en el que se explicaba la azarosa vida de una fuente muy desconocida. Se trata de la fuente de Los Niños de Mariano Benlliure. Tanto su historia como la belleza de la fuente me han animado a traerla a esta sección de mi blog. Espero que os guste.
La Fundación del Canal de Isabel II adquirió en el año 2001, para su nueva sede de la Plaza de Castilla una fuente que en aquellos momentos se pensó que se trataba de una de las fuentes que realizó Mariano Benlliure para su casa del paseo de la Castellana. Más adelante se descubrió que era un encargo que recibió Benlliure del cónsul de Guatemala, Sr. Traumann.
La fuente en cuestión quedó instalada, tras su restauración, en el vestíbulo de la sala de exposiciones de la citada Fundación Canal, sobre una lamina de agua rectangular.
La placa a los pies de la fuente continúa indicando que se trata de la fuente que estuvo en el jardín de Mariano Benlliure, en su Casa-Estudio de la calle de José Abascal, información que debería ser corregida.
La fuente representa la expectación, sorpresa, risa, travesura, susto…ante el juego. Cada niño manifiesta su reacción de forma distinta. Las figuras muestran una delicadeza y expresividad extraordinarias.
Historia
En el año 1908 Mariano Benlliure y Lucrecia Arana adquieren un hotel y varios terrenos a su alrededor en la manzana situada entre la Castellana, la calle José Abascal, Zurbano y Bretón de los Herreros. En el centro de la manzana el escultor construyó su Estudio.
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| Jardín y fachada del Estudio (La Esfera, 7 febrero 1914) |
La fachada fue decorada con un friso, un zócalo y una fuente. El friso estaba formado por parejas de niños que portaban guirnaldas de flores, y el zócalo compuesto también de formas vegetales, todo ello modelado en cerámica policromada.
La fuente consistía en un luneto, o altorrelieve en forma de media luna, con delicadas figuras realizadas en cerámica. Siete niños jugando, empujaban a otro que caía al agua en una taza de mármol semicircular. A partir del modelo diseñado por Benlliure, su colaborador Vicente Camps formó el molde, y la fuente fue realizada en la fábrica de Talavera. Quedó instalada a finales del año 1912.
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| Benlliure junto a la Fuente de los Niños (Foto:.semanasantacrevillent.com/benlliure) |
En 1914 el hotel fue reformado en su interior y se construyó una nueva fachada que daba al jardín, decorada también con cerámica. Se añadieron además algunas guirnaldas con frutas, niños, cisnes blancos…
…Y una segunda Fuente de los Niños, realizada a partir del modelo de la primera, con dos diferencias: las figuras eran de color blanco monocromo, y la taza era rectangular y revestida de azulejos.
La casa de José Abascal llegó a ser muy famosa, por las tertulias que allí tenían lugar y por las personalidades de todos los ámbitos que por allí pasaban.
La fuente era tan bella que los visitantes deseaban tener una igual en sus propios jardines. Benlliure encargó algunas a cuenta de sus clientes.
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| Los infantes de España junto a la segunda Fuente de los Niños (Foto:semanasantacrevillent.com/benlliure) |
Así fue cómo llegaron varias réplicas de la Fuente a Cádiz, Santander, y en Madrid, a la familia Bauer en la Alameda de Osuna –de la que no se conserva ninguna información- y otra al entonces cónsul de Guatemala, Sr. Traumann, que vivía en una finca en Chamartín, encargada en 1923.
Mariano Benlliure murió en Madrid, en su casa de la calle José Abascal, en 1947. Tras su muerte la casa-estudio fue derribada, y los elementos decorativos,se perdieron o fueron a parar a museos o a colecciones particulares.
La primera Fuente de los Niños se conserva completa en una finca en Ciudad Real, adonde llegó procedente de un chalet de la colonia del Viso en Madrid.
La fuente del cónsul pasó por varios propietarios y, finalmente, fue localizada en los años 60 del siglo XX en un vivero del mismo Chamartín -con bastantes daños- tras tantos cambios y traslados. Estaba a la venta.
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