Hemos estado de fiestas, la preparación quedó apartada, como es normal. Algún que otro exceso se ha hecho: exceso de turrón, de chocolate, de cordero, de vino y de roscón.
No pasa nada, las fiestas han terminado y ahora es tiempo de afrontar el penúltimo tramo de la preparación para el Camino de los Ruiz 2017.
Este periodo comienza hoy y terminará en la Semana Santa, a menos de un mes de la salida.
Hasta ahora, en la primera fase, hemos conseguido bastantes cosas, aunque parezca que no.
Ya estamos acostumbrados a caminar ligeros durante dos horas seguidas, al menos. Sentimos cierta dependencia del paseo mañanero, tenemos adaptada parte de la ropa que vamos a utilizar, se ha fijado el reto global y conocemos sobre el papel las dificultades a las que nos vamos a enfrentar. Tenemos preparada y en marcha la organización, sabemos mucho sobre cómo debemos afrontar el Camino.
En este segundo tramo, vamos a ultimar la preparación y la organización.
De momento, y durante el próximo mes, caminaremos tres horas los días laborables y cuatro horas los festivos, a un ritmo vivo.
Vamos a ir metiendo, poco a poco, subidas y bajadas en los paseos con el fin de que el cuerpo vaya acostumbrándose a los cambios de ritmo.
Los trayectos de la vida diaria, -recados, compras etc.- los vamos a realizar de forma rápida, para practicar la caminata a todos los ritmos posibles.
Pretendemos caminar durante la semana alrededor de 120 km., con el fin de coger fondo y saber cómo responde nuestro cuerpo ante un esfuerzo continuado.
En todos los paseos no olvidéis preparar la mente, ensayar la separación cuerpo espíritu, nos hará falta más adelante. Tenemos que aprender a soportar lo mejor posible el sufrimiento.
La organización va a ir reservando hospedajes, contratando transportes y editando guías del Camino.
El Camino está más cerca de lo que parece, cuando queramos darnos cuenta, estaremos en un tren rumo a Irún.
No pasa nada, las fiestas han terminado y ahora es tiempo de afrontar el penúltimo tramo de la preparación para el Camino de los Ruiz 2017.
Este periodo comienza hoy y terminará en la Semana Santa, a menos de un mes de la salida.
Hasta ahora, en la primera fase, hemos conseguido bastantes cosas, aunque parezca que no.
Ya estamos acostumbrados a caminar ligeros durante dos horas seguidas, al menos. Sentimos cierta dependencia del paseo mañanero, tenemos adaptada parte de la ropa que vamos a utilizar, se ha fijado el reto global y conocemos sobre el papel las dificultades a las que nos vamos a enfrentar. Tenemos preparada y en marcha la organización, sabemos mucho sobre cómo debemos afrontar el Camino.
En este segundo tramo, vamos a ultimar la preparación y la organización.
De momento, y durante el próximo mes, caminaremos tres horas los días laborables y cuatro horas los festivos, a un ritmo vivo.
Vamos a ir metiendo, poco a poco, subidas y bajadas en los paseos con el fin de que el cuerpo vaya acostumbrándose a los cambios de ritmo.
Los trayectos de la vida diaria, -recados, compras etc.- los vamos a realizar de forma rápida, para practicar la caminata a todos los ritmos posibles.
Pretendemos caminar durante la semana alrededor de 120 km., con el fin de coger fondo y saber cómo responde nuestro cuerpo ante un esfuerzo continuado.
En todos los paseos no olvidéis preparar la mente, ensayar la separación cuerpo espíritu, nos hará falta más adelante. Tenemos que aprender a soportar lo mejor posible el sufrimiento.
La organización va a ir reservando hospedajes, contratando transportes y editando guías del Camino.
El Camino está más cerca de lo que parece, cuando queramos darnos cuenta, estaremos en un tren rumo a Irún.
¡Ánimo! ¡Buen camino!
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