El monumento se trata de una doble escalera engalanada con fuente, estatuas, escudo y rosetón.Su finalidad es unir la Calle Princesa a la del Duque de Osuna.
La fuente de Cristino Martos también es conocida como fuente de la Escalinata o fuente de los afligidos, incluso como fuente de la calle Princesa al estar ubicada en dicha calle.
La fuente, el conjunto entero, es de 1949 y coincide con la remodelación de la plaza de Cristino Martos, que era como se puede comprobar impracticable desde Princesa. De ahí que a la fuente se la conozca por el mismo nombre. De “Cristino Martos”. Aunque antiguamente, a esta plaza se la conocía por el nombre de “los Aflijidos”, hasta 1895. Los autores de su diseño fueron los arquitectos Pérez Mínguez, que intervino en la redacción del Plan Bidagor, y Manuel Herrero Palacios.
El Plan Bidagor (1944), buscaba la reconstrucción de Madrid tras la guerra civil y pretendía dignificar este tramo de la Calle de la Princesa, haciéndolo más acorde con el cercano Palacio de Liria, y facilitando un acceso más monumental que la cercana escalerilla de acceso a la Plaza de Cristino Martos, único acceso a la misma por entonces y que sigue existiendo en la actualidad.
El conjunto se estructura en una doble escalinata, siguiendo el modelo de la Escalera Dorada de la Catedral de Burgos. De estilo neo-barroco, se compone de tres niveles. En el inferior, las dos vertientes de la escalinata, estando adornados sus pasamanos por pináculos en forma de florón de sabor barroco; en el centro de las mismas, la fuente, compuesta por un pilón semicircular, a la que derraman agua un surtidor de la pared, apareciendo dos delfines unidos por la cola, tallados en piedra de Colmenar, de cuyas bocas también mana agua. En el segundo cuerpo de la fuente se unen los dos tramos de escalera, destacando dos florones y dos farolas tipo "villa"; desde aquí la escalera vuelve a dividirse en dos ramales hasta desembocar en la plaza. Esta parte superior está adornado de un gran frontón mixtilíneo de granito y piedra de Colmenar, enmarcado por dos pináculos en estípite, como los diseñados por el gran arquitecto del barroco castizo, Pedro de Ribera. En el centro del frontón escudo de Madrid, enmarcado por volutas dieciochescas y coronado de escudo real. El remate del frontón, ondulado, se remata por un florón algo más pequeño que los que decoran las partes inferior y media de la escalinata.
A los lados de la escalinata, dos magnífica esculturas del artista Federico Coullaut Valera: la de la derecha representa a la "Abundancia", llevando en su mano izquierda el cuerno que lo simboliza con frutos y flores; la de la izquierda representa a la "Alegría" y lleva una copa.
En la parte que da a Cristino Martos en 1950 se colocó una placa de homenaje al Doctor Jaime Ferrán, con motivo del centenario de su nacimiento, y se optó por dedicarle la fuente entera. La placa no se descubrió hasta 1952
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