miércoles, 18 de octubre de 2017

Leyendas y lugares. El Diablo de Timanfaya. Lanzarote

Resultado de imagen de imagen del diablo de timanfaya  A principios de septiembre del 1730, en el  pueblo lanzaroteño de Timanfaya,  nombre que después recibió el volcán surgido, los pobladores festejaban el matrimonio del hijo del hombre más rico del lugar y la hija de unos agricultores de plantas curativas.
  La pareja  de enamorados soñaban con sus planes de futuro mientras bailaban muy juntos la danza típica de la zona. Cuando de repente sintieron temblar la tierra bajo sus pies y escucharon una gran explosión.
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  Todo el pueblo corrió despavorido  de un lugar a otro sin saber muy bien donde refugiarse puesto que comenzaban a caer rocas de grandes dimensiones por todos lados, aplastando casas, enterrando campos de cultivo y destruyendo todo aquello que había alrededor.
  Una roca de grandes dimensiones salida de las entrañas de la tierra cayó encima de la novia dejándola sepultada, ante la mirada atónita de su enamorado.
  Fue tal la rabia y desesperación del novio que sin pensarlo dos veces cogió del suelo una forca de cinco puntas para intentar quitar la piedra que tenía encima su mujer. 
Símbolo del Parque Nacional de Timanfaya (Lanzarote).
  Sin saber muy bien como, de sus entrañas surgió una fuerza de tales dimensiones que consiguió levantar aquella piedra humeante y rescatar el cuerpo, ya sin vida de su amada.  
   Gritando y con el cuerpo de su mujer en sus brazos corrió por el valle del Timanfaya, hasta que sus fuerzas le permitieron, desapareciendo entre el humo del sulfato que salía del suelo y las cenizas que ya lo cubrían todo 
  Aún así, al ser  una noche  clara de luna, algunos vecinos afirmaron ver como en lo alto de una colina y gritando con una fuerza descomunal,   vieron la imagen de aquel chico con la forca de cinco puntas en sus manos.
Resultado de imagen de imagen del diablo de timanfaya  En ese momento todos los supervivientes del pueblo de Timanfaya y en un mismo tono dijeron…. “pobre diablo”.
 De la sangre derramada por ella por todo el valle nacieron plantas medicinales de las que los padres cultivaban, a lo que todos los supervivientes decidieron ponerle el nombre de los dos enamorados…………. Él se llamaba Aloe   y ella   Vera.
   Años después y en una de las reconstrucciones de la zona apareció el cuerpo del chico petrificado por la lava  y con su forca todavía agarrada con fuerza……………
Pobre diablo………

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