En la Calle San Martín, 2, entre las plazas de Sol y Ópera, casi esquina con Arenal, se encuentra la Churrería Chocolatería Los Artesanos 1902.
Fundada por Don Gabi basándose en los 100 años de experiencia de su familia como churreros.
Más que una empresa es una familia, El y su esposa Carmen son la cuarta generación de churreros, mientras que sus hijos son ya la quinta generación en la faena de alegrar la vida a los clientes con sus churros.
Esta es la historia viva de una familia que pasa de padres a hijos el secreto de realizar artesanalmente un producto tan típicamente madrileño como son los churros con chocolate. En 1902, Don Florencio, bisabuelo de Don Gabi, abrió las puertas de una churrería en la calle Ave María, donde enseño a su nieto Don Galo, padre de Don Gabi.
Una vez que aprendió y perfeccionó el viejo oficio de churrero, comenzó vendiendo churros y porras por las calles de Madrid con una hornilla fabricada por él mismo y que para calentar el aceite usaba madera y carbón; poco a poco empezaron a crecer dentro del mundo de las hostelería con la ayuda de su mujer Doña Ana e hijos. Han tenido churrería abierta en la plaza de Jacinto Benavente.
Pasado el tiempo Don Gabi junto con su mujer e hijos a los que ha enseñado a amar y compartir la larga tradición familiar hasta el día de hoy, que siguen luchando para que no se pierda, conservando la vieja manera de elaboración artesanal de los churros y porras con chocolate.
Los productos Los Artesanos 1902 se distinguen por su alta calidad, sabor y seleccionar el mejor origen de cada materia prima. Los churros y las porras están elaborado artesanalmente como lo hacía Don Florencio (primera generación) en 1902. Los chocolate están elaborados también artesanalmente con una fórmula mejorada por J. Gabriel (quinta generación) con 3 cacaos traídos de América Sudamérica.
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