Es un local mítico de la zona, suele estar abarrotado sobre todo en las horas punta de tapas , pero dentro siempre se encuentra un rinconcito donde poder degustar la cerveza y la generosa tapa. En la terraza es más complicado lo del sitio.
Lo típico en este local es pedir cerveza, siempre dobles, que vendrá acompañada de tapas bastante abundantes. Las tapas no están decoradas, ni están carentes de grasa y calorías, pero si esto no es una de tus prioridades te encantará.
El precio de la caña larga, 2,50 euros parece algo subido pero si tienes en cuenta lo que vas a comer te parecerá bajo.
La terraza te encantará, aunque las tapas pueden ser menores dado que sólo te llevas las que te dan con cada ronda de primeras, perdiendo la oportunidad de repetir.
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