El oficio de abogado al desarrollarse entre disputas, pleitos y controversia se presta a que el saber popular lo haya tenido en el punto de mira.
Abogado joven, pleito perdido.
Abogado joven, pleito perdido.
Abogado de ricos, mal de pobres.
Abogado en el concejo hace de lo blanco negro.
Abogado muy ladino, gusta más de andarse por trochas que por caminos.
Abogado, juez y doctor, cuanto más lejos, mejor.
Amor no mira linaje, ni fe, ni pleito, ni homenaje.
Aunque veas pleito ganado, ándate con cuidado.
Buen abogado mal vecino.
Con los descuidados, medran los abogados.
Cuando dos pleitean un tercero se aprovecha.
Cuando toma cuerpo el diablo, se disfraza de fraile o de abogado.
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