Discurre entre la plaza de la Provincia y el paseo del Prado, junto a la plaza del Emperador Carlos V . Desde finales del siglo XIX, se hizo muy popular al comunicar el centro de la ciudad con la estación de ferrocarril.
El nombre de la calle proviene del camino, que antaño entre espartos o atochas, olivares y cañizares, llevaba a la antigua ermita de la Virgen de Atocha.
Ya en la Edad Media se podía acceder a la ciudad de Madrid desde el poblado de Vallecas por un camino que finalizaba en la plaza del Arrabal (actual plaza Mayor) ubicada a orillas de la muralla de Madrid. Este camino era muy transitado debido a las frecuentes romerías a la ermita de la Virgen de Atocha, fruto de la gran devoción del pueblo madrileño a la Virgen de Atocha.
A comienzos del siglo XVI, 'la calle de Atocha' aparece ya en documentos administrativos de la Casa de Austria, aunque más conocida como camino de Atocha en la jerga popular. Inició su urbanización Francisco de Mora, el primer arquitecto municipal de Madrid, en 1592, como parte de un plan de reformas interiores ideado por Felipe II y su arquitecto Juan de Herrera. En 1610 se creó en la calle el Colegio de los Niños Desamparados y se trasladaron a él los niños que había en Recogimiento de Santa Isabel (fundado también con Felipe II).
No hay comentarios:
Publicar un comentario