Tabernas castizas - Casa Camacho

Casa Camacho está enclavada en uno de los barrios del centro de Madrid. En concreto en el de Malasaña, San Andrés, 4, cerca de la Plaza Marqués de Santa Ana. 

Nunca perdió su esencia desde su apertura en 1929 como almacén de aguardiente. 

 El local fue regentado en la posguerra por un miliciano republicano de nombre Camacho  que contaba a los parroquianos historias de la guerra. Ahora mismo está dirigido por Jesús, Santiago y Miguel, hermanos oriundos de Sanabría que adquirieron el local en 1980. Con su seriedad simpática, hacen las delicias del variopinto público que suele llenar el establecimiento.

 Dependiendo de la hora a la que vayas, puedes encontrarte un público u otro. Si cas  a mediodía, entre semana, encontraras a los tasqueros de siempre, a los hombres que ya peinan canas. Pero si lo que te gusta es un ambiente más joven y moderno, prueba a ir cuando cae la noche o a la hora del aperitivo durante el fin de semana. Un pequeño lugar en pleno corazón del barrio, que ha ignorado por completo las tendencias y las modas y precisamente por ello, siempre ha estado en la cresta de la ola.

  La decoración es la que cabe esperar, polvo centenario por los rincones y barriles enormes de rico vermouth de grifo .Además, el nombre del bar ya es puramente español y el hecho de que para acceder al baño haya que pasar por debajo de la barra le añaden un punto más pintoresco, junto a otros detalles kitsch como los mensajes castizos distribuidos a lo largo de la barra.

   En este bar de Madrid saben cómo servir vermouth, su principal especialidad y ofrece el líquido elemento de la mejor calidad. Además, suelen ser generosos con las tapas. Uno de sus platos fuertes son los famosos yayos, una mezcla sui generis de casera, vermouth y ginebra que por apenas 2 euros te hará acercarte a las estrellas. Si pides tapa con la consumición, te recomendamos las bravas. Sus otras opciones de tapas son clásicos como bonito en escabeche, pepinillo con anchoa, berenjena de Almagro y anchoa en salazón.