Tabernas castizas - Las Bravas

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 Los tres locales de Las Bravas están situados junto a la Puerta del Sol.  Lugar ideal para reponer fuerzas después de una visita al casco histórico, los arrabales de Felipe II, o al Barrio de Las Letras.

  La  taberna comienza a funcionar en 1933, en la ubicación del popular y literariamente conocido como El Callejón del Gato, donde los espejos cóncavos y convexos inspiraron a D. Ramón María del Valle-Inclán la figura del esperpento en su obra Luces de Bohemia (1924). 

   Por entonces se dedicaba a la venta de vinos y licores, tras la Guerra Civil se convirtió en taberna de aperitivos y raciones.

  A comienzo de los años 50 empiezan a elaborar una salsa picante que añaden a las patatas, Una década después, registran Las Bravas®, la marca que da nombre a una deliciosa receta nacida en el Madrid más castizo y que es imitada en toda España.

En 1963 amplían el negocio a la calle Espoz y Mina y en 1974 abren además en Pasaje Matheu.

  Además de las famosas patatas bravas se pueden degustar otros manjares clásicos de la casa como la tortilla de patata con salsa brava, la oreja con salsa brava, los calamares fritos, las hamburguesa con salsa brava, pulpo, gambas al ajillo, etc...

  Puestos a ponerles alguna pega y posiblemente por su confianza en el tirón en sus patatas bravas, tengo que decir que no ponen aperitivo y eso es muy importante en los tiempos que corren y en Madrid sobre todo. Por otro lado el trato humano es bastante altanero y despótico.