Cuenta la leyenda que el Black Velvet es una mezcla de nostalgia por luto y las ganas de diversión. Es la hipocresía de los buenos modales junto con las ganas diversión tomando un buen champán.
Cómo muchos de los cócteles, nació en la Inglaterra victoriana tras la muerte del príncipe Alberto en 1861. Como mandaba el protocolo, en estas ocasiones se prohibía la venta de terminadas bebidas, entre ellas el champán, ya que era y es sinónimo de fiesta.
Un barman londinense se inventó una original forma de seguir sirviendo champán a pesar del luto. Se trataba de camuflarlo con una cerveza negra como la Guinnes.
El Black velvet es la combinación de dos licores que son altamente espumosos. La mezcla de las dos bebidas, hacen de este combinado una mezcla suave y muy refrescante.
Ingredientes:
90 ml de champán
90 mil de Guinnes.
Preparación:
Toda la bebida muy bien fría. Servimos primero la cerveza y encima el champán, muy despacio.
Se puede observar como la Guinnes con esa textura densa envuelve el champán y la espuma gana potencia.
Se sirve en una copa tipo flauta. Aunque podemos utilizar cualquier tipo de copa. De hecho al principio se servía directamente en las pintas de cerveza.
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