El idioma y sus palabras como elementos fundamental de el, forman parte de nuestro ser inmaterial. Olvidar o abandonar nuestras palabras supone una agresión contra la parte no tangible de nuestro ser.
Del ingl. resilience, y este der. del lat. resiliens, -entis, part. pres. act. de resilīre 'saltar hacia atrás, rebotar', 'replegarse'.
Capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos.
Capacidad de un material, mecanismo o sistema para recuperar su estado inicial cuando ha cesado la perturbación a la que había estado sometido.Arrebol:
De arrebolar.
Color rojo, especialmente el de las nubes iluminadas por los rayos del sol o el del rostro.
Colorete (‖ cosmético).
Arrebolada.
Der. de redol.
Salamanca. Ruedo o refuerzo en la falda del traje de charra.Limera:
Del ant. lemera, y este der. de leme.
Abertura en la bovedilla de popa, para el paso de la cabeza del timón.
Acendrar:
De cendrar.
Depurar, purificar en la cendra los metales preciosos por la acción del fuego.
Depurar, purificar, limpiar, dejar sin mancha ni defecto.
Acendrado:
Del part. de acendrar.
Dicho de algo como una cualidad, una conducta, etc.: Puro y sin mancha ni defecto.Melifluo:
Del lat. mellifluus 'que destila miel'.
Que tiene miel o es parecido a ella en sus propiedades.
Dulce, suave, delicado y tierno en el trato o en la manera de hablar.
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