El monumento está situado en el Parque del Oeste y está dedicado al Diario de la Marina y a José Ignacio Rivero su director y decano de la prensa cubana.
El Diario de la Marina fue en los años 20 del siglo pasado un ejemplo para el resto de periódicos americanos, aportando informativo, apertura hacia la cultura, apartados de teatro,música, pintura etc, de la mano de grandes escritores del momento como Borges, Raúl Roa, Alejo Carpentier entre otros.
Pepín Rivero, como era conocido, nació en La Habana en 1895 y tomo las riendas del periódico a la muerte de su padre.
Republicano ideológicamente, supo defender los intereses españoles en Cuba e incluso cuando Franco desterró s D. Juan de Borbón, ayudo a este económicamente. Rivero fue un amigo de España. Murió en La Habana en 1944 y el periódico se siguió publicando en Cuba, bajo la dirección de su hijo, hasta que los castristas entraron en La Habana.
En 1954 se inaugura el monumento, diseñado por el arquitecto Julio Cano Lasso, muy al estilo postmodernista de la época. Sobre un muro de hormigón, cubierto de piedra caliza, un mosaico representando unas estampas cubanas aludiendo a temas cubanos y de labores periodísticas que reflejan de algún modo la modernidad que alcanzo el periódico en la época.
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