Palabras en pleno verano

  A pesar de estar en pleno verano y de sentir la falsa sensación de que la vida se paraliza y que todo se posterga a septiembre, las palabras siguen llegando a este humilde albergue de peregrinos en busca de ánimos, más que otra cosa.

Encurtir:
                        De en- y curtir.

        Hacer que ciertos frutos o legumbres tomen el sabor del vinagre y se conserven mucho tiempo teniéndolos en este líquido.

Paramento:
                      Del lat. paramentum.

   Adorno o atavío con que se cubre algo.
  Sobrecubiertas o mantillas del caballo.  
  Cada una de las dos caras de una pared.
  Cada una de las seis caras de un sillar labrado.

Atunara:
                      De atún.

         Almadraba (‖ lugar en que se pescan atunes).



Perifollo:
                      Del ant. cerifolio o cerfollo, este del lat. caerefolĭum, y este del gr. χαιρέφυλλον chairéphyllon, infl. en su forma por perejil.

      Adornos de mujer en el traje y peinado, y especialmente los que son excesivos o de mal gusto.

     Planta herbácea anual, de la familia de las umbelíferas, con tallos de 30 a 40 cm de altura, finos, ramosos, huecos y estriados, hojas muy recortadas en lóbulos lanceolados, flores blancas en umbelas pequeñas, y semilla menuda, negra, aovada, puntiaguda y estriada, que se cultiva en las huertas por usarse como condimento las hojas, que son aromáticas y de gusto agradable.

          

Quintero:

       Arrendatario de una quinta.

       Labrador o cultivador de las heredades que pertenecen a una quinta arrendada.

       Jornalero que ara y cultiva la tierra.


Quinteria:
                        De quintero.

     Casa de campo o cortijo para labor.